El
31 de octubre de 1958, luego de la caída de Pérez Jiménez y antes de las elecciones de diciembre de ese mismo
año, los partidos políticos venezolanos: AD, Copei y URD firmaron un acuerdo de gobernabilidad
entre sí. El objetivo del
pacto era conseguir la sostenibilidad de la recién instaurada democracia,
mediante la participación equitativa de todos los partidos en el gabinete
ejecutivo del partido triunfador, excluyendo el Partido Comunista de Venezuela, el cual decidió no firmar el acuerdo.
Estaba naciendo el PACTO DE PUNTO FIJO y con ello se estaría cometiendo uno de
los errores más graves, ya que 40 años después llegarían los excluidos al
poder.
En
constelaciones familiares se habla de
que todos los miembros de la familia tienen derecho a tener un lugar dentro de la misma, en un
sentido de pertenencia. Cuando se
excluye a alguien, las generaciones siguientes tienden a repetir esa historia,
ya que los excluidos en algún momento deberán ser escuchados.
Si
revisamos la carta del día que se firmo el Pacto de Punto Fijo encontramos al
planeta Saturno en el signo de Sagitario, Marte y Plutón en signos de tierra.
Sol, Júpiter, mercurio, Neptuno y Venus
en el signo de Escorpio.
Para
la fecha del Puntofijismo el planeta
Júpiter estaba activado gracias a un sextil con Plutón el cual facilitaba
pactos y proyectos entre los involucrados que querían permanecer en el poder,
protegiendo a los partidos de
enemigos. Muchos recordamos cómo
terminaban AD y Copei después de la contienda electoral, abrazados y celebrando
la navidad.
En
estos momentos que se habla de pactos y negociaciones con la Mesa de la Unidad
Democrática y el gobierno Júpiter y Plutón se encuentran formando un aspecto de
cuadratura el cual crea tensión y en donde hay muchísimas dificultades para
lograr un acuerdo. Es la imagen perfecta de un cuadrado o una cajita en donde
la mayoría quiere seguir teniendo beneficios sin mirar a los que están afuera
pasando trabajo.
Urano
que es quien produce los cambios, para octubre de 1958 formaba un aspecto de
cuadratura con Júpiter. Esto significó el no calcular a mediano plazo el riesgo
que significaría esa alternancia en el poder. En octubre del 2016, ambos
planetas se encuentran acercándose a una oposición perfecta que no es más que
no dejar pasar oportunidades. Dicho en palabras sencillas el que haga la mejor
jugada se llevará todos los méritos. Eso sí, hay que verse todos los días en el
espejo y evaluarse.
Momentos
cruciales y definitivos para la historia de Venezuela. Estamos a la puerta de
una lunación en Escorpio que aspecta al
Nodo Norte que habla de salidas
pactadas. Recordemos que Escorpio está
asociado al poder en todas sus formas. Es muy Maquiavelico y su eslogan es: “El
fin justifica los medios”
El 30 de octubre del 2016, la luna nueva puede anunciarnos una apertura que
viene desde el sector IX (extranjero, poder legislativo: Asamblea Nacional). Unas luminarias que forman un aspecto de
sextil al Nodo Norte desde el sector VII el lugar de las negociaciones,
acuerdos y contratos para la gobernabilidad.
Ese día en el cielo se formará una Media Cometa que es una figura formada por la
unión de un trígono con una oposición cerrada con un Sextil. El trígono se da
entre el Sol y Neptuno que anuncian algún tipo de protección o privilegio por parte
del Papa al gobernante. El sextil entre el Sol y el Nodo indica la salida que
desea Nicolás Maduro que no será por la puerta de adelante sino por la puerta
de atrás; y una oposición entre el nodo
Norte y Neptuno mostrando antagonismos, confusiones y que lo que se pide es
complicado e ilusorio darlo. Promesas incumplidas.
En 1958, el pacto llego después de la caída de la
dictadura. Ahora quieren hacerlo al revés. Aquí no funciona la ley matemática
de que el orden de los factores no altera el producto. Primero es restituir la
DEMOCRACIA y luego un acuerdo, pero esta vez con todos ya que así es que se
construirá el país que queremos.