Desde el punto de vista Astrológico
A lo largo de la Historia hemos tenido epidemias que
han dejado a su paso muerte, destrucción y devastación. Aproximadamente cada año
20 de cada Siglo, llega una nueva enfermedad para acabar con una parte de la
población y para pedirnos a los humanos que revisemos lo que estamos haciendo
con nuestro planeta tierra.
En todas estas siempre ha sido el hombre quien con su
afán de conquista y de superioridad no ha respetado las leyes de la naturaleza
y por consiguiente ha tenido que pagar un precio muy alto.
Desde la peste bubónica causada por la pulga de la
rata, hasta el actual Coronavirus hemos sido negligentes en cuanto el respeto
de todos los seres vivos del planeta. El hecho de deforestar bosques, cazar de
manera indiscriminada, contaminar las aguas y los suelos, hasta llegar al
estado más primitivo de comer animales, ha permitido el surgimiento de
pandemias en todos los tiempos de la humanidad.
“Antes que nada debemos entender que compartir las
enfermedades infectocontagiosas con otros animales (zoonosis) nos recuerda
nuestra propia naturaleza, la que hemos olvidado desde que los filósofos
franceses dijeron que somos animales racionales; no obstante, al paso de los
siglos la domesticación o contacto casual con algunos de ellos nos contagió sus
males, como ha sucedido con las influenzas porcina y aviar, por citar los casos
más recientes. Si históricamente el fenómeno ha provocado severos estragos
entre los humanos, este proceso se complicó aún más cuando la conquista
castellana trajo al continente nombrado por ellos América flora y fauna
desconocidas”
…” De igual manera, las pulgas de las ratas o del
perro son parásitos propios de ellos y, a menos de que las poblaciones perruna
o ratonil fallezcan, la plaga no cambiará de huésped; sin embargo, al verse
obligadas a sobrevivir esas pulgas son capaces de succionar la sangre caliente
de un huésped diferente, al cual contagiarían. Fue así como los humanos nos
contagiamos con la peste, la fiebre amarilla, el tifo, el paludismo, el dengue
y otros males que son terriblemente mortales”.Fuente: https://arqueologiamexicana.mx/mexico-antiguo/la-primera-gran-pandemia-de-viruelas-1520
Astrológicamente se pudieran analizar muchas
variables, pero para ello se requiere información muy precisa de cuando comenzó
todo. Hay análisis de varios colegas que han revisado fechas de pestes que han
azotado a enteras poblaciones. Quizás aún no hemos descubierto un hilo
conductor en todas estas fechas, pero sí he observado algunas coincidencias en
periodos históricos que marcaron un antes y un después para la humanidad. Igual
a lo que estamos viviendo en esta segunda década del siglo XXI.
No sólo en los años 20 de cada siglo hemos
tenido epidemias que han afectado a la sociedad. También han ocurrido en otras
fechas, pero en este estudio he revisado sólo algunas de ellas para analizarlas
y compararlas con la actual, desde el punto de vista astrológico.
LLEGARON LAS RATAS
En el siglo XIV tuvimos la peste negra o bubónica que inicio en Mongolia, luego llegó a Asia menor a través de los comerciantes
musulmanes y desde Venecia se extendió por Italia y luego a través de otros
países europeos. Históricamente se
ha afirmado que la enfermedad apareció hacia 1320 en el desierto de
Gobi, entre el norte de China y el sur de Mongolia; y que llegó a este último
país por primera vez diez años después.
La
causa de la plaga se descubrió en 1894 cuando los médicos chinos notaron que
las ratas mostraban síntomas de peste muy similares a las personas, y que las
víctimas humanas a menudo tenían pulgas. La enfermedad generalmente se transmite
por la pulga de la rata. En casos muy especiales el contagio de peste puede
darse por medio de contacto con un animal portador Esta peste
negra aún se considera una enfermedad endémica y sumamente peligrosa. Sin embargo, a diferencia
de nuestros antepasados, ahora sabemos qué causa la plaga y con un tratamiento
rápido, podemos curarnos.
Como no hay fecha exacta de cuando empezó todo, revise
algunos ciclos de finales del siglo XIII, y del siglo XIV en China.
Llama la atención la cantidad de planetas en Signos Cardinales
como es Capricornio o Aries. También que, a finales del siglo XIII, la
conjunción de Júpiter/ Plutón estuviese en los grados finales de Capricornio,
igual a la que tenemos ahora. Es importante destacar que Plutón está
relacionado con plagas, muertes y en el signo de Capricornio está más fuerte
porque se encuentra en exaltación.
Este ciclo, aun cuando dura poco, nos muestra los
cambios sociales importantes y para ese momento formaban una oposición con el
planeta Urano y un trígono con Neptuno, lo cual da para pensar que el contagio
iba a darse de manera muy rápida e inesperada. Los signos cardinales inician procesos que aun
cuando sean dolorosos al final nos ayudan a hacer las cosas diferentes.
EL VIRUS CONQUISTADOR
En el siglo XVI durante el proceso de Conquista de
México, liderado por el español Hernán Cortes, junto a los soldados viajaron
numerosos virus y bacterias que propiciaron enfermedades a las que los nativos
no habían estado expuestos y por consiguiente no podían resistir. Esto fue un
factor determinante para la victoria española contra los aztecas.
La viruela comenzó en febrero de 1519 con la llegada
de Hernán Cortés a México. Según información del sitio The Conversation, la
enfermedad se extendió gradualmente desde las costas hacías el interior del
país y diezmó la ciudad de Tenochtitlan en 1520. Redujo la población en
un 40% en tan sólo un año y contribuyó al fin del Imperio Azteca.
Revisando el ciclo de Júpiter/Plutón que comenzó en
1522 se repite de nuevo en el signo de Capricornio, que está dispositado por
Saturno y que tiene un significado de limitaciones, tristezas y dolor.
Al levantar la carta de los harmogramas, que es un
gráfico que permite ver la intensidad de los planetas en el cielo en un periodo
de tiempo utilizando los aspectos que forman entre ellos, específicamente las
conjunciones, se puede observar como esa onda se eleva a partir de 1520. Se
puede deducir entonces que en el cielo había muchísimos aspectos de conjunciones
de planetas sociales y transpersonales como Saturno/Plutón, Marte/Saturno, Marte/Pluton,
Saturno/Neptuno.
INGLESES GO HOME
Llegamos al Siglo XVII y en noviembre de 1620,
el barco Mayflower salió de Inglaterra y navegó por la costa para comenzar a
poblar la región de Norteamérica. Durante varios meses los más de 100
tripulantes vivieron en el barco mientras se realizaban los trabajos de
construcción de las viviendas. Debido a la humedad y el frío del invierno, la
mitad de la tripulación falleció debido a enfermedades pulmonares y resfriados debido
a un extraño virus.
Al montar de nuevo el ciclo de Júpiter/Plutón lo
volvemos a conseguir en un signo Cardinal: Aries, y esta vez además junto al
planeta Urano.
También Italia tuvo su epidemia que fue “La Gran Plaga
de Milán”, con una serie de brotes de peste bubónica que se produjeron desde
1629 hasta 1631 en el norte y el centro de Italia cobrando la vida de
aproximadamente 280.000 personas, en Lombardía y Veneto.
LA MARSEILLAISE
En el siglo XVIII, específicamente en 1720, un
barco que transportaba sedas y algodón y que estaba contaminado con el bacilo
de Yersin introdujo en Francia la Gran Peste de Marsella. Fue una de las peores epidemias registradas en
Europa después del gran brote de la peste negra, la cual cobró la vida de entre
90 mil a 120 mil personas (una cantidad inmensa, considerando que alrededor de
400 mil personas habitaban esta región francesa).
Aquí podemos observar una triple conjunción entre Júpiter,
Urano y Marte en Libra, otro signo cardinal en quincuncio con Neptuno en Tauro.
Como los planetas en libra se acercaban a la oposición con Neptuno esto creo
muchas limitaciones y desolación.
AMOR EN TIEMPOS DE COLERA
En el siglo XIX el mundo escucho hablar del Cólera. Aunque ya se había presentado en antiguas
civilizaciones como China, India y Grecia, entre 1817 y 1838 se registró la
primera pandemia mundial; de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud
(OMS). En 1822 el cólera se había extendido desde la India hasta muchas partes del mundo. La bacteria causante del cólera se transmite por el agua y
alimentos contaminados por las heces de personas infectadas. De todas las enfermedades que surgieron a raíz de
las deficientes condiciones de salubridad de aquel entonces el cólera fue
quizás la que causó más víctimas y la que ha dejado en nuestra consciencia
colectiva, hasta hoy, la profunda e indeleble huella del horror y desolación.

Si revisamos el grafico de 1821 vemos que en el cielo
se daba una configuración muy interesante otra vez en el signo de Capricornio.
Comenzaba el ciclo de Urano y Neptuno, que dura 172 años y nos muestra los
cambios sociales importantes. Esta vez encontramos a 4 planetas sociales en
signos cardinales: Urano/Neptuno, Júpiter y Saturno formando una cuadratura
entre ellos.
También en el gráfico del ciclo planetario hay una elevación de la onda del armónico 1 (conjunciones) que va de 1817 hasta 1824 indicando que fue la segunda pandemia mayor que afectó a Europa, América y Asia.
LA ESPAÑOLA CUANDO BESA
En el siglo XX, específicamente en 1918 llego
la gripe española, que mató a 50 millones de personas. A finales de la Primera
Guerra Mundial este virus se extendió rápidamente por todo el mundo e infectó a
un tercio de la población mundial en tan sólo 18 meses. Los primeros casos se
registraron en Estados Unidos.
El principal factor de la expansión fue el rápido y
masivo movimiento de tropas militares alrededor del mundo. De acuerdo con
National Geographic, la estricta censura militar impedía que la prensa
estadounidense y europea pudieran informar sobre los brotes. Únicamente en
España, que permaneció neutral, los medios de comunicación hablaban libremente
de esta enfermedad.
En 1920 se dio el segundo brote de peste
neumónica. Transmitida de las ratas a los humanos, resurgió en Manchuria, China
y se extendió hasta Estados Unidos. En ese año finalizo la gripe española que
comenzó dos años antes y acabo con el 6% de la población mundial.
Otra vez el ciclo de Júpiter/Plutón que comenzó en
1918, cayó en un signo Cardinal: Cáncer, regido por la luna que en astrología
mundial se relaciona con las masas.
EL VIRUS CHINO
Y llegamos al Siglo XXI. A principio del 2020 nos enteramos
de que en Wuham, China, en un mercado, donde vendían carne de animales salvajes
y víboras se transmite una epidemia que la OMS la ha llamado COVID 19 y que ha infectado al 19 de marzo a más de 220.000 personas y sigue en aumento cada día.
Actualmente
tenemos en el cielo 4 planetas en el signo de Capricornio: Júpiter, Saturno,
Plutón y Marte en donde cada uno transmite su carga energética. Júpiter expande,
Saturno trae bloqueos y limitaciones, Marte causa fiebre y Plutón mata.
Revisando
la línea de tiempo cuando tuvimos ciclos parecidos a los de la actualidad
encontré el de Saturno/Plutón en Capricornio que comenzó en 1517 en Madrid.
Escogí ese, debido a que fue previo a la conquista de México por Hernán Cortés y sus huestes quienes entraron a
México-Tenochtitlan el 8 de noviembre de 1519. La
historia consecuente es ya bien conocida por todos: la capital del reino de
Moctezuma fue conquistada a sangre, fuego y epidemia de viruela. En esa fecha teníamos
a cuatro planetas en los signos igual a los que tenemos ahora como son Marte en
Sagitario (conquista), Urano en Tauro (cambios sociales, climáticos), Saturno en
Capricornio (derrumbamiento de estructuras), Plutón en Capricornio (transformaciones
y soltar el control).
El
17 de enero de este 2020 comenzó un nuevo ciclo de Saturno Plutón, que durará 38 años, pero
lo que más llama la atención es que al levantar la carta para Wuhan, provincia
de China donde empezó todo encuentro la similitud con la carta del ciclo en
México en cuanto al ascendente en Escorpio y que en ambas cartas se dan en la
casa III, que está relacionada con los viajes y la pérdida
de territorio durante una guerra (XII de IV).
Revisando el índice cíclico de
este 2020 y el 2021 podemos observar el incremento de la onda los meses de
febrero y marzo, luego seguiremos teniendo algunos picos hasta enero 2021 y
luego finalmente bajan. Esto puede significar que llegará la calma y se
encontrará la solución. Es muy probable que como en las guerras hay muchos que
se beneficiaran de esto política, económicamente y que por supuesto tengamos
efectos colaterales. Lo importante es mantener la calma y respetar las reglas
del juego.
Se ha hablado mucho sobre que
las guerras en estos nuevos tiempos no serán convencionales sino con armas químicas
y bacteriológicas. Y que el hombre en su afán de conquista y superioridad no le
importa acabar con otros sean o no de su misma especie. Esta sólo en nosotros
hacer que esto se acabe, además de reflexionar que no se puede subestimar a
nadie y que como dice el refrán: “Guerra avisada no mata a soldado, y si lo
mata es por descuidado”.